Todos tenemos días buenos y malos, lo único que hay quien tiene más malos que buenos.


Hoy se ha celebrado el Día Mundial de la Salud Mental y quería hacer una entrada especial. 1 de cada 4 europeos sufre algún tipo de enfermedad mental. Con esta estadística es muy probable que: o la padezcamos o conozcamos a alguien. El segundo es mi caso y la enfermedad es depresión (y por partida doble).
Es difícil detectar este tipo de enfermedades si uno mismo no te lo dice, y ya os digo que alguien que padezca alguna difícilmente te lo dirá por culpa de la sociedad en que vivimos. Frases como "esta loco" "ai! pobrecit@" "depresión? eso es cosa de mujeres mayores" (y no, la juventud también tiene depresión) son comunes, y no debería serlo. Deberíamos ser capaces de pensar en que son gente como tu y como yo, aunque con alguna diferencia sí, pero esto no hace que debamos tratarlos de forma completamente distinta, sólo con un poco más de tacto (sí, tacto, eso de lo que carece mucha gente) ya que sí que son más vulnerables. Enfrentarse a los problemas cotidianos puede ser un gran reto ya que un grano se puede convertir en una montaña, pero para esto estamos la gente de alrededor. No podemos saber que les pasa por la cabeza, porque piensan lo que piensan, y en muchas ocasiones creo que esto es lo que menos importa. Hacerles saber que estás a su lado es lo más importante. La comprensión. El decir: "tranquila, no pasa nada y si no quieres hablar ya lo harás cuando te veas con fuerzas y ganas" aunque realmente quieras saber en que piensa, que es el que hace que no tenga ganas de hacer nada, de no hablar contigo, de no verte. Y eso también es difícil. Es difícil ver como parece que no existas para alguien, como te deja de lado, como a veces es capaz de tratarte de la peor manera... y seguir queriéndola igual porque sabes que no son actos voluntarios, seguir a su lado y intentar hacerla reír y que esté lo mejor posible, que no significa bien.
Puede que esas personas se sienta culpable de no estar a la altura. Es difícil vivir con un trastorno así y es difícil estar al otro lado. Por mi parte a veces pienso en si lo haré bien. En si estarán bien. En si mis palabras ayudarán o harán daño. También pienso que lo importante no es hacerlo bien, sino hacerlo! Porque en el fondo saben que lo haces por ellas, porque te preocupas, aunque a veces a lo mejor no lo vean. Un te quiero, un abrazo, un "aquí estoy por ti" puede ser de gran ayuda para hacerles sentir mejor. A la gente no se la quiere porque si, se la quiere por lo que es, con lo bueno y lo malo. Lo bueno y lo malo... algo tan relativo...
Realmente se me hace complicado escribir esto. Tampoco se muy bien que escribir. Algunos pensarán que es un intento de quedar bien, de hacer ver lo buena persona que soy (si es que lo soy, claro! que no soy yo quien debe decirlo ), pero no. Solo creo que deberíamos tener más consciencia y ser más personas de vez en cuando... También se me hace difícil porque no se si habrá personas a las que les sentarán mal algunas de mis palabras, pero esa tampoco es la intención, y si es así ya pido perdón.

Simplemente: 

Todos tenemos días buenos y malos, lo único que hay quien tiene más malos que buenos.

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